
Quinta entrega de nuestra Ventana
«Diego Abad de Santillán, o Sinesio Baudillo García Fernández, cual fuera su verdadero nombre, fue en parte militante, en parte intelectual y, fundamentalmente, traductor. Desde su infancia —nació en España y de niño vino a vivir a Argentina— estuvo signado por el vínculo entre América y Europa. Su voluminosa producción intelectual, la cantidad ingente de traducciones realizadas y su praxis militante en las filas del anarquismo internacional son ejemplos de cómo la traducción puede convertirse en un instrumento de lucha del dirigente revolucionario o el intelectual comprometido. En Abad de Santillán, la traducción acompaña cada acción política y actúa como organizador del pensamiento político de las bases. Su caso, sin embargo, no es único ni excepcional, aunque sí es peculiar el hecho de que no haya quedado en el anonimato, cosa que, por otra parte se explica mucho más por su papel como cuadro y organizador de diversos movimientos obreros nacionales e internacionales y por su posición de director del periódico anarquista La protesta que por su oficio de traductor […], sujeto traductor vinculado a lo internacional y que motoriza nuevos tipos de vínculos entre subsistemas emparentados, como los de las organizaciones anarquistas latinoamericanas y europeas, cuya confluencia constituiría el sistema de la cultura libertaria hispanófona.
Del lugar subsidiario de la visión más tradicional, según la cual el intelectual comprometido es, además, traductor, se puede pasar a pensar en un traductor comprometido o un traductor militante, o incluso como un activista cuya acción política gire en torno de la traducción. Nos referimos aquí al traductor que efectivamente hace de su práctica un compromiso […].
El subsistema político cobra vida y se convierte en escenario de luchas; las traducciones de determinados autores dejan de ser una transferencia hecha para llenar un hueco dentro de un sistema y pasan a ser la decisión de un sujeto o un colectivo que intenta, a través de la
inserción de nuevas ideas, influir sobre un grupo social y reposicionarse en la lucha política».1
1. Extracto del artículo «Polisistemas anárquicos.
La traducción política en el marco del polisistema», de Gabriel Torem. Acta Poetica 35-1, ENERO-JUNIO, 2014 (45-62).
